★★★½

Critica de El Libro de Boba Fett

A finales de diciembre de 2020, se reveló en una escena post-créditos de El Mandaloriano, la próxima serie del universo de Star Wars, El Libro de Boba Fett, algo que a muchos tomó por sorpresa porque no esperábamos que Boba Fett tuviese su propia serie cuando ya teníamos a un mandaloriano repartiendo leña por la galáxia.

Pese a ello, la moción fue acogida con estusiasmo por parte de la mayoría del fandom, quienes querían que se indagara más en el personaje y que nos contaran qué pasó luego de que éste cayera en las fauces del Sarlacc, y cómo es que el Boba-cazarecompenzas de la trilogía original es ahora un buen tipo, honorable y justo.

La serie funciona como un spin-off de El Mandaloriano o de El Regreso de Jedi, si se quiere. Y precisamente se encarga de resolver prácticamente todas las interrogantes que a los seguidores de la saga galáctica les estaban mosqueando desde que Legend dejó de ser canon. Ahora, la pregunta es ¿Han sido satisfactorias las respuestas a estas incógnitas?

La serie cuenta en la producción con Jon Favreau, Dave Filoni, Robert Rodriguez y Kathleen Kennedy, teniendo a Jon Favreau como guionísta de todos los episodios. Temuera Morrison (Aquaman, 2018) repite como Boba Fett y lo mismo Ming-Na Wen (Push, 2009) quién vuelve a interpretar a la letal Fennec Shand.

La primera parte de la serie nos muestra el camino que recorrió el personaje de Boba Fett hasta renunciar a su pasado como un badass espacial. Mientras que en la segunda parte tenemos un festival de cameos, un capítulo donde Boba textualmente no aparece y otro en donde paradójicamente tiene un cameo (sí, un cameo en su propia serie) sin siquera una linea de diálogo. Pero en su lugar nos ofrecen sin duda los mejores eposodios conducidos por los personajes de Din Djarin, Grogu y Luke Skywalker. Un fan servis muy bien servido.

La serie inicia con nuestro amigo cazarecomenpezas escapándo del estómago del todopoderoso Sarlacc (algo menos espectácular de lo que podría esperarse), y nos enseña como es que termina siendo rescatado y «adoptado» por una tribu tusken. Con ellos Boba Fett emprende un camino místico de redención espiritual, para finalmente convertirse en uno más de ellos como un guerrero de las arenas.

Simultáneamente se nos presenta al sindicato Pyke, los principales antagonistas de la serie, quienes trafican especias en Tatooine. Todo esto contado a base de flashbacks que el mismo Boba padece mientras se recupera en un tanque de bacta, luego de asesinar a Bib Fortuna y apropiarse de los dominios del Hutt.

Lo del Sarlacc estuvo algo flojo para las espectativas de muchos (hay que decirlo), pero estos tres primeros episodios sirven para encaminar al personaje de Boba Fett en su nueva senda, para exponer a los villanos, y para darnos una nueva mirada de los moradores de las arenas, reconociendo distintas tribus y que no todas son tan despreciables como nos las habían pintado en las películas. Conocemos parte de su cultura, algunas de sus tradiciones y credos, e incluso nos cuentan algunos aspectos del pasado geográfico de Tatooine.

Si bien El Mandaloriano sigue la figura de El Lobo Solitario y su Cachorro, El Libro de Boba Fett (desde ahora sólo El Libro) sigue la de Lawrence de Arabia, al menos en la primera parte de la serie.

La clave western que maneja El Libro se encuentra más acentuada que en El Mandaloriano, por estar localizada en Tatooine, lugar de desiertos, forajidos y peleas en cantinas. Tenemos un asalto a un tren y un duelo de pistoleros como en una película de Sergio Leone. La serie recupera con acierto los estílemas del western mediterraneo que Lucas trabajó sobre todo en la primera película, La Guerra de las Galaxías con el personaje de Han Solo.

La serie mejora paradójicamente con la ausencia de Boba Fett y la aparición de Mando (sirviendo de puente con su tercera temporada), con la batalla final viendo a Boba Fett por fin montado en el rancor y con la épica entrada de Cad Bane al más puro estilo de Lee Van Cleef.

Para concluir nuestra critica de El Libro de Boba Fett, decir que es una serie que cumple muy bien dentro de la clave Star Wars, introduciendo personajes de los cómics como Black Krrsantan (más conocido como el wookie negro), y ampliando gratamente el universo de Lucas en la mayoría de sus facestas. Para mi una buena serie de ciencia-ficción, pero inferior a su predecedora, El Mandaloriano.